No obstante, lo que resulta más sorpresivo aún, es la indiferencia de los cuerpos de seguridad ante estas acciones de acosos y violación a la privacidad. Pues, aunque el conglomerado no era muy grande, permanecieron por largo rato con la intención de incomodar y en ningún caso, se observó intención por parte de organismos de seguridad de acercarse a ellos.