La abogada Eva Alcalde, quien lleva las causas contra el arzobispo de Oviedo, explica que «al margen de tomar el control y bloquear las cuentas, lo que hicieron (Lumet Dei) fue vender los bienes inmuebles de la asociación. No todos, los más emblemáticos, pero bienes que eran muy importantes y dejaron de pagar y de atender gastos».
«Desde el momento en que ellos procedieron a tomar el control de la asociación no dieron ningún tipo de información sobre ni la gestión que hacían con el dinero, ni mucho menos que iban a proceder a la venta de los inmuebles y, por lo tanto, tampoco les ofrecieron ningún tipo de alternativa».
Aunque el nombramiento de monseñor Sanz como Comisario fuese válido no estaría habilitado para vender patrimonio o intervenir las cuentas donde está el dinero de las hermanas. El arzobispo, respecto a los edificios que ha vendido de la asociación religiosa, ha conseguido hacerse con algo más de 12,5 millones de euros, un dinero que nadie sabe dónde está ni a qué se ha destinado.