Parece ser que después del vapuleo bochornoso que se le hizo al gobierno por los test hay más paises que les ocurre esto. Los científicos británicos han detectado que 17,5 millones de test rápidos son falsos.
El gobierno británico admite que es un fiasco. El ejecutivo había comunicado a su población que esta sería una estrategia vital para combatir el coronavirus. Ahora ha tenido que renegociar otra partida que sí sea eficaz.
El responsable de test de las autoridades sanitarias británicas explica que éstos solo pueden detectar el virus en las personas que presentan síntomas graves.
Con este caso, podemos corroborar que no solo es el gobierno español el que se equivoca. Está claro que ahora mismo el mercado es una jungla y es muy difícil conseguir test fiables. Una reflexión se podía hacer de este asunto. ¿Dónde está ahora toda la prensa que a cuchillo pedían las cabezas del gobierno? ¿Dónde se encuentran esos editoriales dónde se exigían dimisiones por doquier?
Con esta noticia ha quedado muy claro cuáles son las intenciones de la mayoria de los medios de este país. Nunca fue la crítica constructiva, pero sí podemos decir que fue la crítica destructiva. Los mercenarios y lacayos de la derecha se han abrazado como un sediento en el desierto a cualquier resquicio de noticia para la crítica del gobierno.