
Gimnasio vs Calistenia: ¿Cuál es el Mejor Entrenamiento Para Ti?
22 de julio de 2025
¿Qué futuro les queda a los partidos políticos de siempre en España?
23 de julio de 2025El papel de los medios de comunicación en la política española: ¿Influyen realmente o solo reflejan lo que pasa?

En España, la relación entre política y medios siempre ha estado en el centro del debate. Vivimos en un país donde las noticias vuelan, se comentan y generan opinión casi al instante. Y en ese contexto, entender si los medios están moldeando la política o simplemente actuando como espejo de la sociedad se vuelve más importante de lo que parece.
¿Qué tanto pueden influir los medios en lo que pensamos?
No se trata solo de informar. A menudo, los medios seleccionan qué temas merecen estar en la portada, cuánto espacio se les dedica y con qué tono se presentan. Todo eso influye —y mucho— en cómo la gente percibe la realidad. Este fenómeno se conoce como agenda setting, y, aunque parezca algo técnico, está presente todos los días en nuestras redes, televisores y periódicos.
Por ejemplo: si un medio decide hablar toda la semana de inmigración, es muy probable que ese tema acabe siendo una preocupación social —incluso aunque los datos objetivos no indiquen una crisis real.
¿Existen ejemplos concretos? Más de los que creemos
En los últimos años hemos visto cómo la cobertura de las elecciones cambia radicalmente según el canal que se mire. Algunos resaltan a ciertos candidatos, otros minimizan sus errores o amplifican los de sus rivales. Y lo mismo pasa con los escándalos políticos o las protestas: el enfoque del medio puede provocar reacciones emocionales muy distintas en la gente.
Esto no es casualidad. En muchos casos, el encuadre de una noticia no solo informa, sino que también sugiere cómo deberíamos sentirnos respecto a ella.
El dilema eterno: ¿cómo informar sin perder la objetividad?
Uno de los grandes retos actuales del periodismo en España es no caer en el partidismo. En una sociedad polarizada, donde las etiquetas ideológicas pesan tanto, es fácil que un medio termine alineándose —de forma más o menos evidente— con un lado del espectro político.
Pero aquí está el problema: cuando un medio se convierte en actor político, deja de ser solo informativo. Y eso, a largo plazo, erosiona la confianza del público.
¿Qué están haciendo los medios para mantener su credibilidad?
Afortunadamente, no todo está perdido. Algunos medios han empezado a adoptar prácticas más responsables:
- Ser más claros con sus fuentes y procesos editoriales.
- Reconocer errores y corregirlos públicamente.
- Dar espacio a opiniones diversas, aunque no coincidan con su línea editorial.
Estas medidas ayudan, pero no lo solucionan todo. También depende de nosotros, los lectores, tener una actitud crítica y no quedarnos con una sola versión de los hechos.
En resumen: ni víctimas ni verdugos
Los medios en España no son simples observadores, pero tampoco son los únicos responsables del clima político. Actúan como amplificadores, pero también como filtros. Y en ese delicado equilibrio es donde se juega su verdadera influencia.
¿Pueden mejorar su papel? Por supuesto. ¿Podemos nosotros exigirles más? También. Porque si la información es poder, su uso responsable debería ser una prioridad para todos.